sábado, 23 de noviembre de 2013

¿ES COMPROBABLE EL LENGUAJE RELIOSO O NO?

Para hablar del lenguaje religioso Hare creo la parábola del estudiante paranoico, que padece manía persecutoria por parte de sus profesores. En ella se muestra que por más razones probatorias que se den a dicho estudiante sobre la benevolencia de los profesores para con él, todo será inútil. ¿Qué tipo de argumentos podrán convencer al paranoico? Ninguno, porque es un enfermo.

Del mismo modo que el estudiante no se fía de sus profesores, (tiene un trastorno que le hace desconfiar de ellos hagan lo hagan) del mismo modo la persona religiosa sigue creyendo en el amor de Dios pase lo que pase, por muchas desgracias que sucedan.



Otro profesor de Oxford contraargumenta que el lenguaje religioso si puede ser comprobado, pero su comprobación es “escatológica”, es decir, al final de los tiempos, tras la muerte.
Expone la parábola de los dos viandantes. Ambos viajan andando por un camino, uno de ellos dice que el camino por el que andan lleva a una ciudad celestial, el otro sostiene que no lleva a ningún lugar pero que como no hay otro camino no le queda más remedio que seguir. Ninguno de los dos ha hecho nunca el camino, y en función del final cada uno interpreta lo que les sucede de modo distinto. Para uno las cosas buenas son un adelanto de lo que será el final y las malas son pruebas para hacernos dignos de ese final feliz. Para el no creyente ninguna de esa interpretaciones tiene sentido. Se limita a sufrir lo malo y disfrutar de lo bueno.

Según esta parábola no podemos comprobar fehacientemente nada sobre la existencia de Dios durante la vida pero si al final.

jueves, 7 de noviembre de 2013

A LA GENTE NO GUSTA QUE UNO TENGA SU PROPIA FE

En la entrada anterior se hablaba del argumento de autoridad.
Hoy en día parece que la autoridad no es un experto u otro. Hoy en día parece que la autoridad de la que tenemos que fiarnos es la gente, la opinión pública, la mayoría.

Parece que el que no piense como la mayoría está equivocado. La gente señala con el dedo a los que son distintos, a los que tienen creencias diferentes, a los que no piensan como todos.

Hay una vieja canción que cantaba LOQUILLO en la que se hacía alabanza del que va contracorriente. Alaba a aquel que piensa por sí mismo y no se somete a la autoridad de la mayoría. QUIERE VIVIR FUERA DEL REBAÑO.

El filósofo no es obligatorio que vaya contracorriente pero al pensar por sí mismo, al cuestionar y poner en duda las respuestas tópica que se dan a las preguntas es fácil que sus ideas no coincidian con las de la mayoría. Por ese motivo puede que la gente lo critique.

lunes, 4 de noviembre de 2013

¿EXISTE LA MATERIA TRAS NUESTRAS SENSACIONES?

Reichenbach imagina que nuestro universo consiste en una inmensa caja cúbica de caras traslúcidas. Fuera de la caja revolotean pájaros, pero lo único que podemos ver son las sombras sobre las caras del cubo. De entrada pensamos que las sombras son la única realidad. Pero a la larga, después de observar numerosas regularidades en las formas cambiantes de las sombras, aparece un Copérnico que enuncia la hipótesis osada de que las sombras son producidas por objetos –pájaros, en este caso- que existen fuera de la caja.


Imaginad que el cubo se contrae hasta convertirse en nuestra piel. Tenemos entonces, dice Reichenbach, una analogía útil sobre la experiencia humana. Es evidente que todo lo que sabemos acerca del mundo exterior a nosotros lo inferimos a partir de algo que está dentro de nuestra piel, o mejor dicho, dentro de nuestro craneo, donde se interpretan los datos sensoriales. Pero las regularidades de estos datos, tales como las formas de los pájaros en nuestras retinas, nos sugieren la hipótesis de que más allá de nuestros ojos hay un mundo independiente de nuestra experiencia interior. Esta hipótesis tiene un poder de explicación y de predicción enorme. Además, es una teoría de una simplicidad extrema y por ende, por el principio de la navaja de Occam, preferible a explicaciones más complejas.

Martin Gardner: "Los porqués de un escriba filósofo"

viernes, 25 de octubre de 2013

CONTRA EL ARGUMENTO DE AUTORIDAD

El argumento de autoridad es un argumento débil pero se utiliza muchas veces. Lo mejor cuando se hace una afirmación es poder probarla acudiendo a los hechos mismos, confrontándola con la realidad de la que hablamos para comprobar si es cierta o no. 

Cuando no podemos hacer esto usamos el argumento de autoridad que consiste en acudir a un maestro de prestigio para resolver un problema. “Esto es así porque así lo dijo Aristóteles”. Es un argumento débil porque también los sabios pueden equivocarse. Algo puede ser falso aunque lo diga la persona que más sepa del mundo. 
Ha habido épocas en que se ha vivido sometido al argumento de autoridad. No se invitaba a la gente a pensar por ellos mismos. Únicamente se les pedía que creyeran lo que el sabio decía. 

CRISIS DEL ARGUMENTO DE AUTORIDAD.
A partir del Renacimiento comienza a entrar en crisis el argumento de autoridad. La revolución científica de Galileo pondrá en cuestión todo lo que Aristóteles sostenía sobre astronomía. Del geocentrismo aristotélico se pasa al heliocentrismo copernicano. Todo el mundo descubre que los sabios de la antigüedad estaban equivocados.

Descartes -en el XVII- se propondrá aceptar únicamente como verdadero aquello de lo cual no tenga duda. Su propio yo se convertirá en la máxima autoridad. Textualmente dice: “no admitir como verdadera cosa alguna, como no supiese con evidencia que lo es" y más adelante dirá "no comprender en mis juicios nada más que lo que se presentase tan clara y distintamente a mi espíritu, que no hubiese ninguna ocasión de ponerlo en duda.”

Hume alababa un libro diciendo que era muy bueno: porque sacudía el yugo de la autoridad y acostumbraba a los hombres a pensar por sí mismos. 
En la frase de Hume se ve que el filósofo británico ya no piensa que la autoridad nos ayude a encontrar la verdad, al contrario, es un yugo que nos fuerza a ir por el camino marcado. Lo que hay que hacer es sacudir su peso y pensar por uno mismo. 

Kant, en el XVIII, va a proponer como lema de la Ilustración la frase: "Atrévete a saber". 

Literalmente Kant lo expresa así: 
La ilustración es la salida del hombre de su minoría de edad. El mismo es culpable de ella. La minoría de edad estriba en la incapacidad de servirse del propio entendimiento, sin la dirección de otro. Uno mismo es culpable de esta minoría de edad cuando la causa de ella no yace en un defecto del entendimiento, sino en la falta de decisión y ánimo para servirse con independencia de él, sin la conducción de otro. ¡Sapere aude! ¡Ten valor de servirte de tu propio entendimiento! He aquí la divisa de la ilustración.

Como ves, Descartes, Hume y Kant fueron tres filósofos que querían que pensáramos por nosotros mismos.

TE invito a que respondas alguna de estas preguntas o todas. ¿Crees que hoy en día la mayoría pensamos por nosotros mismos? ¿En qué aspectos de la vida piensas que la gente actuamos como borregos y en cuales pensamos de modo independiente? ¿En qué aspectos te parece bueno acudir al argumento de autoridad y en cuales sería bueno pensar por nosotros mismos?


¿Estás seguro de que el mundo es real? (SOLIPSISMO)

¿Has pensado alguna vez que solo tú existieras en el mundo?
¿Se te ha ocurrido que quizá todo sea una alucinación de tu mente y que no existe el mundo ni las demás personas ni nada de nada? Solo existes tú que lo estás imaginando todo.
Eres alguien que sueña todo el tiempo. Eres alguien que sueña que es un joven que está matriculado en un instituto y que ahora está leyendo un blog. Pero no es verdad. Todo es un sueño, el instituto, tus profesores, tu familia. No hay nada material, no hay mundo, no existe ni tu propio cuerpo. Únicamente existe tu pensamiento que está imaginándolo todo. Sí, sueñas que te acuestas y te levantas, sueñas que sueñas, pero en realidad toda vida es un largo sueño en el que nada es real.


¿Cómo puedes estar seguro de que esto no es cierto?
Cuando estás en un sueño no te das cuenta de que estás soñando (al menos muchas veces no). ¿Cómo podemos saber que nuestra vida es real?

jueves, 17 de octubre de 2013

Una frase de Heráclito

Esta semana hemos estado hablando de los presocráticos. Uno de ellos, Heráclito, era llamado “El oscuro de Éfeso” seguramente porque sus contemporáneos no entendían muy bien lo que decía.

Su obra tiene un carácter aforístico.

Una de sus frases dice:

EL CARÁCTER DEL HOMBRE ES SU DESTINO.

Para comentar esta frase dos aclaraciones.

Podemos entender CARÁCTER como el modo de ser de alguien. (sin entrar en muchas precisiones)
Podemos entender DESTINO como aquello que le sucederá a una persona en la vida.

¿CREES QUE EL MODO DE SER DE ALGUIEN ES EL CAUSANTE DE LO QUE LE SUCEDA EN LA VIDA?